Plantadores de Historias

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Los Plantadores de Historias es la nueva actividad de fomento a la lectoescritura impulsada por Atrapavientos y que se pondrá en marcha en el segundo semestre de 2017. Desde Atrapavientos defendemos que las actividades de animación a la escritura contribuyen al fomento de la lectura, dado que cuando se ejercita la escritura creativa también se lee. Por eso, en Atrapavientos le damos tanta importancia a las actividades que implican la creación literaria.  Pero, además, queremos que cada sesión de escritura tenga una continuidad de modo que se pueda realizar un seguimiento con el paso del tiempo.

En definitiva, Los Plantadores de Historias es un proyecto de fomento a la escritura muy especial que se desarrolla en diferentes fases:

  1. En la primera fase se celebra el taller de escritura creativa en un colegio, instituto, biblioteca o asociación. Son actividades diseñadas para un máximo de 25 asistentes. En estos talleres trabajamos los textos que después plantaremos. Sí, habéis leído bien. Los plantaremos. Desarrollamos la actividad con un papel especial: papel plantable o papel con semillas que puede ser plantado posteriormente en una maceta, un pequeño huerto urbano, un parque o un cementerio. Con el tiempo, ese papel crecerá y tu historia se convertirá en una pequeña planta.
  2. Plantar las historias: los diferentes formatos de la actividad permiten que se celebre bien en pequeños grupos de 25 personas, en las que cada asistente se llevará a casa una maceta con tierra y su historia plantada. Cada maceta irá identificada con el nombre del autor del texto: “Historia plantada de Carlos, 6 años”. Después, será cosa de cada participante cuidar y regar su historia, ver cómo crece y compartir el resultado con nosotros.
  3. En el apartado Las Historias, de esta página web, recopilaremos los textos de los talleres de escritura. Junto a los textos, conforme se reciban las imágenes de la evolución de cada planta, añadiremos el resumen gráfico de las historias.
  4. Destinatarios de la actividad:
  • Grupos pequeños de hasta 25 personas (cada participante se va a casa con su historia plantada en una maceta).
  • Colegios, institutos y bibliotecas: podemos celebrar Plantadores de Historias en tu centro educativo o biblioteca. Incluso si en tu colegio o instituto ya tienes tu propio jardín o huerto, buscaremos entre todos un hueco para plantar las historias de todos los alumnos. Si no tienes jardín ni huerto, nosotros nos encargamos de instalarte una jardinera para ubicar, por ejemplo, en la entrada del espacio o donde tú nos digas; de modo que todos los alumnos del centro podrán cuidar y regar las historias.
  • Asociaciones y colectivos con riesgo de exclusión: uno de los resultados más asombrosos que hemos descubierto en nuestros talleres de escritura es que muchos participantes se “abren” por primera vez ante los demás y nos cuentan, de manera espontánea, algún problema grave o delicado que no habían contado hasta ahora. La escritura les sirve como herramienta de comunicación. Chavales sometidos a acoso escolar, mujeres que sufren violencia de género, adolescentes con problemas de adaptación o que son sometidos a cualquier tipo de abusos. No sólo nos cuentan su historia sino que, de algún modo, se sienten libres y cómodos a la hora de expresarse. Podemos plantar todas esas historias, podemos contarlas en la página web de Plantadores de Historias, y podemos crear una comunidad de participantes solidarios, más valientes y empáticos. Para este tipo de colectivos también podemos plantear el taller específico: El cementerio de miedos.
  • Ciudades y poblaciones enteras: imagina que tu pueblo o tu ciudad tiene uno o varios parques, imagina que los vecinos de cada barrio donde hay un parque participa en la iniciativa y escribe su historia, imagina que después plantamos entre todos los vecinos las historias que han escrito en el parque de tu barrio. Por eso decimos que Plantadores de Historias puede ser una campaña de animación a la lectoescritura tan pequeña y tan grande como tú quieras. Este formato requiere la participación activa y la implicación de los ayuntamientos, para que coordinen la plantación de historias con los servicios locales de parques y jardines. Una manera de fomentar la participación ciudadana e impulsar los espacios públicos.
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